En medio de la creciente tensión generada por el reclamo policial por mejoras salariales, el Banco Nación de San Javier se ha visto obligado a cerrar temporalmente sus puertas debido a la falta de custodia policial para garantizar la seguridad de sus instalaciones y clientes.

Esta medida, que afecta directamente a los usuarios de la entidad en la localidad, es un reflejo de las dificultades que enfrentan las entidades bancarias para asegurar la protección necesaria en un contexto de conflicto entre las fuerzas de seguridad y el Gobierno.

El reciente acampe en Posadas, tras el fracaso de las negociaciones entre el sector policial y las autoridades gubernamentales, ha llevado a la suspensión de todos los servicios adicionales, dejando a las instituciones financieras en una encrucijada.

Ante esta situación, muchas entidades se ven forzadas a optar entre cerrar sus puertas o recurrir a la contratación de personal de empresas de seguridad privada para mantener la operatividad mínima.

Los usuarios del Banco Nación de San Javier y la comunidad en general aguardan una pronta solución a esta problemática que afecta el normal desenvolvimiento de las actividades financieras en la región.