En una entrevista con FM Alto Uruguay, Roque Gervasoni, presidente del Instituto de Macroeconomía Circular (I.M.A.C), abordó la situación del Ingenio Azucarero San Javier y las razones que llevarán a la ausencia de la zafra cañera en 2024 en la cuenca. Comento sobre el compromiso del gobierno en asistir a los productores en este proceso, afirmó además que, en este nuevo escenario económico, la dificultad para planificar y proyectar es notable, pero se comprometió a seguir cuidando a la gente y explorar opciones para la reconversión del ingenio.
Gervasoni explicó que la decisión se fundamenta en el proceso de modernización del ingenio, buscando una mayor eficiencia y compacidad. Sin embargo, diversos factores económicos han influido en la inviabilidad actual de iniciar la construcción de un ingenio nuevo. Señaló que el dólar oficial, que el año pasado estaba en trescientos cincuenta pesos, ha aumentado a ochocientos cincuenta pesos y sigue en alza, haciendo que la inversión sea prácticamente inviable en el momento actual.
El presidente del I.M.A.C indicó que el ingenio, adquirido en 1962 y con numerosas deficiencias a pesar de los esfuerzos de mantenimiento, presenta problemas estructurales significativos, como el espesor de las paredes de las calderas, que no cumplen con los estándares necesarios para garantizar la seguridad. Ante la posibilidad de accidentes, Gervasoni subrayó la responsabilidad de ser prudentes y reconocer que el ingenio, debido a su antigüedad, ya no es viable.
Gervasoni también mencionó la pérdida de hectáreas de caña, pasando de dos mil novecientas a quinientas hectarias, y la competencia con productos importados, especialmente de Brasil, que afecta la economía del ingenio. Ante esta situación, destacó la necesidad de ser responsables con los recursos estatales y asegurar la asistencia a los trabajadores y productores.
Se anticipa que se realizará un censo similar al efectuado en ocasiones anteriores, y se subsidiará a los productores de acuerdo con las hectáreas de caña que posean. Gervasoni enfatizó que, aunque la situación es difícil, se buscarán alternativas y se continuará asistiendo a los productores hasta lograr su recuperación.
En cuanto a la posible privatización, Gervasoni consideró que todo puede ser estudiado, pero señaló que la preocupación reside en el cuidado del recurso humano, y que cualquier decisión al respecto debe ser analizada con precaución.