El gobierno nacional está evaluando estrategias como la reconversión de yerbales y la flexibilización de importaciones para abordar el conflicto yerbatero, mientras promueve el diálogo entre los actores clave para encontrar soluciones sostenibles.
El sector yerbatero enfrenta problemas relacionados con la sobreproducción, los bajos precios y la competencia de las importaciones. Esto ha generado tensiones entre productores, industriales y el gobierno.
Según el Periodista Gerardo Stregevich, el gobierno propone reconvertir parte de los yerbales para reducir la sobreproducción. Esto implicaría reemplazar algunas plantaciones de yerba mate con otros cultivos más rentables o sostenibles, con el objetivo de equilibrar la oferta y la demanda.
Otra medida considerada es flexibilizar las importaciones de yerba mate, lo que permitiría una mayor competencia en el mercado interno. Sin embargo, esta propuesta genera preocupación entre los productores locales, quienes temen que afecte aún más sus ingresos.
Desde Buenos Aires aseguran que el gobierno busca promover el diálogo entre los actores del sector (productores, industriales y trabajadores) para alcanzar soluciones consensuadas. Se destaca la importancia de encontrar un equilibrio que beneficie a todos los involucrados.
El conflicto yerbatero tiene un impacto significativo en la economía regional, especialmente en provincias como Misiones y Corrientes, donde la yerba mate es un pilar económico. Las medidas propuestas buscan no solo resolver el conflicto actual, sino también garantizar la sostenibilidad a largo plazo del sector.