Una visión compartida
El legislador del PAyS, destacó que el espíritu del Proyecto de Ley obedece a una visión colectiva con organizaciones de la agricultura familiar, campesinas, indígenas, de pequeños productores, instituciones académicas y sociales, organizaciones ambientalistas, culturales y comunitarias, que promuevan la Soberanía Alimentaria,y una agricultura de tipo tradicional y agroecológica.
«Nos da orgullo haber elaborado este proyecto que protege la soberanía alimentaria ante los avances de los transgénicos, y los derechos intelectuales y patentes de las grandes corporaciones.
Siempre mantuvimos el convencimiento que es necesaria una norma que fomente la soberanía alimentaria, y no hay soberanía sin la capacidad para producir nuestras propias semillas y resguardarlas”, afirmó el autor del proyecto que presentó junto a sus pares de bloque.
Sostener la producción de semillas
El diputado Sereno recordó que el PAyS hace mucho tiempo que trabaja en esta idea, y espera contar con el apoyo de los otros bloques en la Cámara de Representantes, para aprobar la norma, «a pesar de que sabemos que hay presiones de grandes intereses económicos en esto».
«Garantizar la biodiversidad de nuestros territorios»
El proyecto plantea en el marco de derechos de la Soberanía Alimentaria la necesidad de proteger las semillas, en particular las nativas y criollas, las generadas y mejoradas con recursos públicos, para la producción de alimentos sanos frente a los intentos de apropiación privada de las semillas.
«Buscamos garantizar el presente y futuro de la alimentación y la salud, la biodiversidad y la conservación de nuestra cultura y territorios, y conocimientos tradicionales del pueblo misionero”, expresó Sereno.
El bloque del PAyS entiende que el Estado tiene obligaciones intransferibles para garantizar el cumplimiento de esta ley: diseñar las políticas públicas en materia de semillas, garantizar el derecho a la reserva y uso propio gratuito sin restricciones, conservar y proteger las semillas nativas y criollas, fomentar la producción de la agricultura familiar, campesina e indígena.
Así como incentivar la producción comunitaria y pública de semillas con recursos públicos, promover la investigación participativa y corresponsable, la formación, el acompañamiento técnico y la innovación para la producción de semillas y mejorarlas a través de la investigación e innovación productiva y tecnológica.