A dos días del debate, Sergio Massa se rodea de peronistas no kirchneristas y Javier Milei termina de conformar su mesa chica. Fiel a su estilo, Sergio Massa se reservará las horas previas al debate para repasar sin presiones su estrategia para el mano a mano con Javier Milei. Sin embargo, en los últimos días centró su campaña en juntar apoyos de peronistas no k, en busca de los votos que le suelen ser esquivos.

Por eso, sumó a Juan Manuel Urtubey, exgobernador de Salta, y a Oscar Herrera Ahuad, gobernador de Misiones, a su lista de invitados para el debate presidencial de este domingo en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Con ellos y la diputada Natalia De la Sota recorrió esta semana las provincias de Córdoba, Misiones y Santa Fe. También contará con el apoyo de Graciela Camaño, su exaliada política en el Frente Renovador.

Javier Milei termina de conformar su mesa chica, el  pacto de Acassuso dejó heridas internas en La Libertad Avanza y generó cruces entre los dirigentes de la cúpula libertaria. Los roces, la nueva organización y los relegados.

El lunes en una reunión en el Hotel Libertador, el armador nacional de La Libertad Avanza, Carlos Kikuchi, discutió e insultó en fuertes términos al líder de la mesa política, Guillermo Francos. Luego, salió de la sala y tuvo un intercambio áspero con Eduardo “Lule” Menem, quien es sobrino del expresidente y trabaja en el armado libertario.

Según pudo saber TN, el enojo del dirigente tiene relación directa con los comunicados de los legisladores electos que se pronunciaron en contra del pacto electoral que realizó Javier Milei con Mauricio Macri y Patricia Bullrich en Acassuso. Varios hasta amenazaron con abandonar el bloque.