La innovación y el talento de los estudiantes de la Escuela N.º 55 de San Javier fueron reconocidos a nivel provincial luego de clasificar a la instancia nacional de las Olimpiadas de Robótica, con un proyecto basado en la energía solar fotovoltaica.
En comunicación con FM Alto Uruguay, la facilitadora pedagógica y referente de la Red Maker San Javier, María Elena Altamirano, explicó que la propuesta fue desarrollada por alumnos de sexto y séptimo grado, quienes desde principios de año vienen trabajando en la implementación de energías renovables en entornos rurales.
El proyecto, presentado en la ciudad de Apóstoles durante la instancia regional, consistió en una maqueta funcional programada con Arduino, diseñada en la plataforma Tinkercad, que permite demostrar cómo la energía acumulada a través de paneles solares puede utilizarse para automatizar elementos en las chacras.
Los estudiantes Axel Domínguez y Jehiel González, quienes viven en colonias rurales, fueron los protagonistas de esta propuesta innovadora que busca no solo impulsar la robótica en el aula, sino también aportar soluciones sustentables y económicas para la vida en el campo.
Altamirano destacó que el trabajo se desarrolló de manera transversal junto a docentes de Ciencias Naturales y Matemática, fortaleciendo la formación integral de los alumnos. “La premisa de este año era pensar en el futuro cuidando el medioambiente, y los chicos lo interpretaron perfectamente”, expresó orgullosa.
Además, agradeció el apoyo de la directora de la institución, los docentes, los padres, el intendente local y la comunidad, que colaboraron con logística y recursos para que la delegación pudiera participar de la competencia.
La instancia nacional se llevará a cabo el 26 de septiembre en Posadas, y en caso de clasificar, los alumnos podrían representar a la Argentina en la competencia mundial que se realiza en Singapur.
“Estamos muy orgullosos de los niños, porque más allá del resultado, ya son referentes en innovación y cuidado del medioambiente para toda la comunidad”, concluyó Altamirano.