La derrota del populismo de extrema izquierda es contundente. Un 62% de los chilenos rechazó la propuesta de reforma constitucional de Chile frente a un 38% de apoyo.
El texto rechazado era el compendio más peligroso de la cultura abortista y LGTB.
La izquierda proponía el aborto como derecho, la identidad sexual y orientación de género, el buenismo en el Código Penal y la plurinacionalidad destruyendo la unidad nacional. ¡Peor era imposible!
La gente salió a la calle a festejar la victoria de la vida, la familia y la libertad.
Desde Chile aseguran que el riesgo sigue latente, porque la extrema izquierda que no acata el resultado del plebiscito y que ya está incendiando las calles. Llevan desde 2019 utilizando la violencia como herramienta política.